sábado, 20 de septiembre de 2008

“Mi cuerpo”

“Mi condena perpetua, desenfrenos encubiertos
Tus deseos y flagelos concretos
En tus recuerdos, en tus manos cortadas
Te incitan hasta el pecado terreno
Suplicando me quede a tu lado eterno.

Piel blanca, transparente y aromática
Suave, ligera, líneas en curvas bellas
Fogosidad sin límite, pero palpable
Amada y odiada por ser como soy
Viviré con el tormento, sin más recelos.

Envidiada y esperada en tiempos insanos
Causando maltrechos a quien me ama
Y decide no tenerme entre sus sábanas
Por motivos erróneos, cargando cruces
Que piensan, evitarán desearme por siempre.

Mis caderas enmarcadas por sus huesos
Envueltas, lujuriosas ellas
Mis senos esculpidos por mi hijo
Marcados pezones me han dejado
Que festejan mis amantes clandestinos.

Mis manos se precipitan hacia su presa
Mis labios besan esta torpeza
Mi boca de frutilla emite quejidos
Que excitan a cual comensal
Hasta que pierden, su valiosa conciencia.

Mis glúteos te encarcelan prisionero
Mi vientre recibe tus quejidos placenteros
Mi trasero recibe tus mimosos golpecitos
Mi vagina penetra tu hombría -¿Perfecta?-
Esculpiendo a mano tus escondidos desenfrenos.

De pie ante tu estampa en la cama
Me contorneo al son de la música
Movimientos que no dejas de advertir
Encandilando tú sombra enajenada
Culpándote por el placer que calmas al verme.

En sus retinas y en sus éticas
Quedaré estampada – ¡Ay Señores!-
Cada noche sedienta y ardiente
No hay clemencia que llore por sus errores;
Mas de recordar mi cuerpo; arden en el infierno.”

1 comentario:

Natalia Molina dijo...

Esta muy buena tu poesia , pero sin duda esta fue mi preferida por eso te posteo aqui

slaudos
natalia Molina.